Ustedes son la alegría, la esperanza, la ilusión, la creatividad, los sueños, las sonrisas...la certeza de un mundo mejor.
Las travesuras, los juegos, los dulces, las chucherias, la infancia es una etapa maravillosa de nuestra vida, donde reina la inocencia, no existe el tiempo, ni las preocupaciones y las molestias y tristezas se van en un 2x3.
Y es precisamente en la infancia donde se forman los valores, donde se asumen las primeras responsabilidades, donde se forjan las bases del hombre y la mujer del futuro.
A nosotros los adultos, nos corresponde cuidar y proteger a todos los niños y niñas, para que tengan una infancia feliz, sana, segura, llena de bendiciones y aprendizajes.
Y al mismo tiempo, debemos mantener siempre la conexión con ese niño que fuimos, que somos, y que seremos, porque esa es la fuente de alegrías, ilusión y esperanza en nuestra vida.
Dios los bendiga cada día de su vida.
¡Felicidades a los niños y niñas en su día!
Heryck Rangel
19 de julio de 2020.
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