Un mercedes Un maserati Diez Indigentes Cien Indigentes Las horas pasan La temperatura baja La ciudad duerme El silencio reina Siempre a reinado el silencio Nadie dice nada En el metro abren mil libros Entra un gitano Canta con entusiasmo Nadie levanta la mirada Cada uno en lo suyo Cada uno en silencio Una señora toma antidepresivos En Paris no necesitas prescripción Puedes tomarlos como copas de vino En todos lados hay copas de vino Toma el dueño del Mercedes Toma el dueño del Maserati Toman los miserables Toma Paris y se embriga para olvidar Vuelve a reinar el silencio Heryck Rangel Hernández
Coordinador Nacional del Partido Verde de Venezuela | Doctor en Ecología | Profesor Universitario.