El sistema capitalista ha convertido a la sociedad en
simples actores del mercado, en su voracidad y arrogante pretensión
antropocéntrica reduce a la naturaleza a una lista de recursos naturales, sin
tomar en cuenta los ciclos y equilibrios de nuestra Madre Tierra.
El siglo XXI nos presenta un doble reto: superar el
rentismo petrolero y construir un nuevo modelo económico productivo que
garantice la suprema felicidad social para el pueblo, y la protección de nuestra
Madre Tierra, para ello requerimos un modelo económico diversificado,
equilibrado y justo, con una profunda ética Ecosocialista.
El periodista norteamericano Adam Minter en su libro
“Junkyard Planet: Travels in the Billion-Dollar Trash Trade” expone el funcionamiento
y la importancia de la industria del reciclaje en todo el planeta. Plantea la
visión de la industria del reciclaje como un negocio global. Según Minter, esta
actividad mueve 500.000 millones de dólares anualmente en el mundo, más o menos
el producto interior bruto (PIB) de Noruega, y emplea a más gente que cualquier
otra industria del planeta exceptuando la agricultura.
Ahora bien, tomando como referencia algunos países de
nuestra región, según cifras del Banco Central de Nicaragua (BCN), al año el
reciclaje genera un promedio de 44 millones de dólares, el doble de los
ingresos de la exportación de pescado, tres veces más que las bebidas
alcohólicas y cuatro veces más que la exportación de tabaco. Mientras que en
Costa Rica mueve cerca de 95 millones de dólares, entre compra y venta de
bienes reciclados y, además, por concepto de desechos electrónicos el país
exporta poco más de 2 millones de dólares cada año.
En Venezuela, debemos lograr una dinámica que siembre
valores ecosocialistas en nuestra sociedad, que active la corresponsabilidad
ciudadana en la disminución del volumen de basura que a diario se produce, que
promueva la constitución de nuevas unidades productivas y que garantice una
nueva cultura del reciclaje.
Desde el Movimiento Ecosocialista de Venezuela (ECOVEN) promovemos el reciclaje, como
alternativa económica desde la organización popular, la clave está en constituir
unidades productivas a escala local que desarrollen actividades de recolección,
acopio, comercialización y transformación de materiales, que hoy terminan en
vertederos a cielo abierto.
Asimismo, proponemos al Presidente Nicolás Maduro Moros y
al Consejo Nacional de la Economía la incorporación del Motor Reciclaje en la
Agenda Económica Bolivariana. Sigamos avanzando juntos en la construcción de la
Venezuela potencia y la preservación de la vida en el planeta.
Heryck
Rangel
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